Tanto el 2020 como el 2021 quedarán marcados para muchas industrias como uno de los más negativos de la historia. Sin embargo, en el caso del mercado de real estate, la pandemia apenas profundizó una crisis que ya arrastraba años de recesión.
Si quieres saber más acerca del estado del sector inmobiliario post- pandemia, te invitamos a leer el siguiente artículo.
El Covid-19 causó una catástrofe. Los casos de las oficinas y locales comerciales son claros ejemplos; la compraventa de inmuebles y el mercado de alquileres no están exentos, aunque el impacto fue menor. Pero también surgieron, como sucede en los períodos de crisis, grandes oportunidades, nuevas maneras de hacer negocios y cambios en las necesidades del consumidor.
En el caso del mercado inmobiliario esto se reflejó en nuevas herramientas tecnológicas para potenciar los servicios. Por ejemplo, entre las herramientas más destacadas se encuentran los tours virtuales de las propiedades, la implementación de la firma electrónica para la firma de contratos, acuerdos y un fuerte refuerzo de la comunicación con el cliente para ofrecer respaldo y seguridad de la información privada.
Del lado del cliente, el cambio se evidenció en que las zonas más alejadas y con más espacios verdes se volvieron muy solicitadas y han aumentado su valor durante el último tiempo. En promedio este aumento ronda entre un 30% y 40% dependiendo la gestión inmobiliaria y las características del hogar.
Por otro lado, se redujo la demanda de oficinas y edificios pensados como espacios de trabajo, con lo que tal vez en el futuro haga falta algún tipo de reconversión residencial en algunos edificios de oficina que en muchos casos siguen estando con poco uso.
Al principio de año el tipo de propiedad que más creció fueron los lotes para construcción, pero en un contexto tan cambiante como el actual resulta difícil determinar los factores que influyen en que un tipo de propiedad sea más demandada que otra, por lo que no queda claro si estas tendencias se mantendrán durante el 2022.
El principal obstáculo del 2021 para el mercado fue la inestabilidad y volatilidad económica, que generó fricción y desgaste. Por eso, cerrar una operación en medio de esta incertidumbre es un trabajo muy delicado y laborioso por parte de las personas que se dedican al rubro inmobiliario. Haciendo clic aquí, podrás aprender que aspectos deben tener en cuenta los agentes inmobiliarios para vender exitosamente una primera vivienda y no fallar en el intento.
Para el 2022 no hay que bajar los brazos y siempre hay que mirar para adelante con optimismo. Teniendo en cuenta que el 2021 fue un año difícil para el sector, también trajo a cuestas muchas enseñanzas y transformaciones, que hoy en día, son positivas.
Lo que más generaría un impacto positivo en el mercado inmobiliario es la estabilidad económica que se logre alcanzar. Las políticas públicas que beneficiarían al sector son aquellas que puedan promover la previsibilidad, incentivar la construcción, los préstamos hipotecarios y la generación de empleos.
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