En el mercado de las inversiones inmobiliarias es muy común que un broker sea confundido con un agente inmobiliario, ya que ambos términos se utilizan muchas veces como sinónimos por tener características parecidas. Sin embargo, sus labores son diferentes, aunque se complementan.
En pocas palabras: los agentes hacen todas las gestiones necesarias para que el comprador y el vendedor de una propiedad lleguen a un acuerdo y finalicen la transacción con el broker.
Para que un proyecto inmobiliario se lleve a cabo de la forma correcta, es importante conocer las tareas específicas de cada uno. Veamos cuáles son sus principales diferencias y por qué ambos son indispensables en el sector inmobiliario.
¿Qué hace un broker inmobiliario?
Un broker inmobiliario es una persona especialista en finanzas y economía que se encarga de dirigir, organizar y coordinar los procesos legales entre el vendedor y el comprador durante una gestión inmobiliaria.
Para esto, el perfil profesional debe contar con conocimientos claros del mercado, de la legislación, cotización y de todos los procedimientos necesarios para ayudar a las personas a encontrar las mejores opciones de propiedades y precios.
Dentro de las tareas más comunes de un broker, se encuentran las de supervisar a tasadores, compradores y vendedores.
Además, analiza el mercado inmobiliario y obtiene las propiedades que, según su criterio, generarán mejores rendimientos; y posteriormente las revende para conseguir ganancias.
Otra de las características que tiene este perfil es que puede trabajar a distancia para negociar inmuebles que se encuentren en otras ciudades o países, mientras se apoya en los agentes, quienes se pondrán en contacto con propietarios que quieran comprar y vender.
¿Qué hace un agente inmobiliario?
Un agente inmobiliario es quien se encarga de gestionar, asesorar y facilitar el proceso de compraventa, alquiler, permuta o cesión de bienes, inmuebles, etc. Su trabajo se centra principalmente en captar clientes, buscar propiedades y mostrarlas.
Para esto, el profesional debe conocer muy bien el mercado, ya que asesorar a sus futuros compradores requiere de ciertas tácticas y dotes porque su objetivo es lograr convencerlos y negociar la compraventa.
El agente inmobiliario también se encarga de ofrecer un servicio personalizado para que el cliente sienta confianza en la persona que lo va a representar.
Asimismo, este perfil participa del proceso post venta para brindar un servicio más completo: se encarga de hacer los trámites engorrosos para el cliente, tales como enviar emails, preparar documentación y permisos, etc.
Dos casos de éxito de brokers y agentes inmobiliarios
En el mercado inmobiliario existen varios profesionales con historias de superación y una larga trayectoria que han logrado el éxito. Conoce algunos de los más inspiradores:
Chad Rogers
Pasó de ser economista a un millonario agente inmobiliario luego de descubrir que eso era lo que de verdad quería hacer al realizar prácticas en una inmobiliaria de Los Ángeles.
Hoy en día es una celebridad reconocida de los Estados Unidos que ha tenido hasta su propio programa de televisión. Su clave del éxito: buenas fotografías, una página web profesional y visión internacional.
Fredrik Eklund
Dejó la industria del cine para enfocarse en el negocio del Real Estate. Comenzó vendiendo pequeños apartamentos en la ciudad de Nueva York y hoy tiene una exclusiva cartera de clientes como Leonardo DiCaprio, Jennifer Lopez, Mick Jagger y muchos famosos más.
Se convirtió en un caso de éxito para el mercado inmobiliario. Dentro de sus claves, destaca la importancia del aspecto físico y señala la trascendencia de aprender a vender tanto productos y/o servicios como a uno mismo.
CRM para brokers y agentes inmobiliarios
Cualquiera sea tu función o rol dentro de este amplio mercado, un CRM inmobiliario te permitirá potenciar tus resultados y gestionar mejor tus estrategias. Se trata de una herramienta útil para la planificación y el crecimiento en escala.
Recuerda que tanto un broker como un agente inmobiliario son pilares fundamentales al momento de vender o comprar una propiedad. El asesoramiento de un profesional siempre evitará dolores de cabeza en el futuro y brindará confianza y seguridad en las decisiones de los clientes.
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